sábado, 22 de septiembre de 2018

En la cola de la gasolina

Algunas imágenes tomadas con el fono móvil.

Día combustible y de clases

A veces se me hace difícil escribir en el blog. Poner al día las cosas que pasan. ¡Tantas cosas que decir!
Esta semana estamos probando la nueva conexión a internet con Net Uno, luego de que ya CANTV se declarara muerto en Maracaibo. No da respuesta, no da hace reparaciones y poca gente refiere que se los hayan repuesto los cables robados.
Pero el día de hoy y el de ayer fue terrible con las colas de la gasolina. Largas, mucha tensión, discusiones de la gente, el caos, los lectores fallan, la gente desesperada, la gasolina se acaba al mediodía. Nadie da respuesta. Suma otro de los problemas que estamos viviendo.
A pesar de todo pude echar algo. Nos movilizamos y pude ir a la clase del diplomado de formación de formadores de la universidad de Ciencias de la Salud (UCS). Ya estamos en el módulo de herramientas de la enseñanza. Fue la nota alegre del día para compensar todo el estrés de la mañana. Cada vez que nos reunimos para las clases es todo un compartir con amigos. Toda una bendición.

viernes, 7 de septiembre de 2018

Penumbras

Esta semana de recortes eléctricos ha sido realmente fuerte. Dormir se hace sumamente difícil. Luego el trabajo se hace doblemente improductivo porque llegas con sueño y te encuentras que tambien hay apagones. Hay que aguantar otro poco a que esto se solucione.
Algunos racionamientos han sido hasta de 7 horas y otros incluyen hasta dos series en el día. Hay sectores con más horas de racionamiento.
Por supuesto, esto dificulta la dispensación de agua, la labor económica de algunos expendios, y otras tantas cosas que dependen de la electricidad.
Por eso esta semana ha sido dura. Esperemos se regularice pronto. Maracaibo es una ciudad muy dura si no hay acondicionamiento del aire. Es dura, no es amistosa. Es peleonera y cuaima. La zancudera se adueña de las noches y las horas pasan más lentas.

sábado, 1 de septiembre de 2018

Los principios éticos de Tavistock

Los principios de Tavistock se formularon para construir un marco para analizar situaciones asistenciales que escapan a la atención directa de pacientes concretos y obligan a decisiones complicadas sobre las interacciones de los equipos sanitarios y la distribución de los recursos para el bienestar de la sociedad. Se elaboraron en 1998 en Londres.
Los principios son:
Derechos: las personas tienen derecho a la salud y a la atención sanitaria.
Equilibrio: la atención de cada paciente es fundamental, pero la salud de la población también debe ser nuestro objetivo.
Ámbito: además de tratar la enfermedad, estamos obligados a aliviar el sufrimiento, minimizar la discapacidad, prevenir las enfermedades y fomentarla salud.
Cooperación: la atención sanitaria tendrá éxito si colaboramos con las personas a quienes atendemos, entre nosotros y con los profesionales de otros sectores.
Mejora: la mejora de la atención sanitaria es una responsabilidad sería y continuada.
Seguridad: no hacer daño.
Mentalidad abierta: tener una mente abierta, honrada y digna de confianza es vital en la asistencia sanitaria.
Mucho que analizar de estos principios. Mucha tela que cortar con respecto a cómo está la asistencia sanitaria en estos tiempos. Pero no debemos faltarle a la ética.
Tomado de Bárbara Bates.