viernes, 21 de febrero de 2020

La consulta privada

Nunca en mi vida hice consulta privada. Hice mi rural de médico y creo haber hecho una guardia en una clínica de Oejda y otras presencias en Cabimas. 
Ahora debido a la situación del país cuando el salario se ha depreciado tanto que hay que tener lo que llaman un plan B, también por una posible jubilación. Pero, luego de casi 30 años de graduado, que nunca le he cobrado a la gente, tengo que hacerlo. 
No sólo eso, hacer papelería, sello, consultorio, etc. 
La comencé ya avanzado el año pasado y he visto pocos pacientes. Entiendo que la situación no está para eso. Entiendo que ha habido migración de colegas y que debe haber más oportunidad en este aspecto, pero la gente da prioridad a otro tipo de gastos. 
Lo que he descubierto, a pesar de ya tener tantos años escuchando a la gente, caminando, conociendo el panorama de la salud tanto pública como privada en la ciudad, es que la gente, los pacientes necesitan que los,oigan, que los toquen y que los entiendan. Siempre he pensado y actuado en consecuencia de que los y las pacientes no son niños que hay que regañarlos. Más bien, aprender de ellos, sus motivaciones, sus sufrimientos. 
Es satisfactorio oír cuando me dicen que nunca los habían escuchado de esa manera o que los habían examinado. Eso va en coherencia cuando en la oficina les pregunto si los han examinado. Ante esta pequeña encuesta del sí o no, es asombroso ver que los sí tienen menos votos. 
Ahí vamos, aprendiendo poco a poco. 

jueves, 9 de enero de 2020

Honorarios médicos y otras cosas "por fuera"

Una situación que me ha tocado observar en la ejecución de la auditoría médica son los cobros de honorarios médicos fuera de los acuerdos ya establecidos. Quiere decir, fuera de los tabuladores según plan de salud o aseguradora. Esos acuerdos son convenimientos entre el colega y el paciente. Algunos colegas sencillamente no se pliegan al acuerdo por los montos. Yo les aconsejo, igualmente, que no vean pacientes de ese plan de salud o de ese seguro. Cualquier cobro adicional es un gasto por encima de lo que la familia puede costear. Si la familia o el paciente se lo permite y se desea una interacción con ese colega queda a cuenta de ellos. En este rango de acciones no hay rigidez tampoco. Siempre depende del caso. 
Lo que no es ético es cobrar ese excedente a destiempo, sin haberlo acordado previamente, cómo cuando el paciente ya va a entrar en pabellón, situación que observé varias veces y que ameritó, en muchas ocasiones, omitir el acto quirúrgico por parte del colega. Muy lamentable. 
#auditoriamedica #medicinainterna #medicina 

Automonitoreo en diabetes

Con diabetes, vivir es angustioso. Es la dieta, son las medicinas, es el día a día y sus quehaceres, la crisis, la falta de poder económico. El manejo tiene muchas aristas. Pero esta bien claro que la diabetes es una enfermedad evolutiva, no es estacionaria. La persona lentamente agota su reserva pancreática inexorablemente si no hace esfuerzos. 
Nos toca a los médicos enseñar, capacitar a cada uno cada vez que los vemos en la consulta. Y parte de esa educación es el Automonitoreo. El paciente se involucra en su padecimiento y en su tratamiento, en una labor que se realiza en conjunto con el médico, el equipo de salud y si familia. Es lo que se llama Modelo de Cuidados Crónicos, que es una herramienta importante y de avanzada, en contraposición con los esquemas actuales de manejo de enfermedades agudas. 
#diabetes #medicinainterna #prevencion 

sábado, 4 de enero de 2020

Al fin pude tanquear gasolina, con marcaje

Una de las personas que me ayudó a poder tanquear hace una semana me recomendó una estación de servicio qué es más probable en la que pudiera tanquear. Madrugué y me puse en la cola a varios kilómetros de distancia. El personal de la GN que organizaba apareció a las 8 y marcó los carros. Afortunadamente quedé de último para un total de 260 vehículos. Es decir número 260 de 260. 
La cola corría y se movía bien. Llegué al final al surtidor al mediodía y, tras de mí, pusieron la banda de cierre. No lo podía creer. Detrás de mí habían quedado otros carros que no pudieron, temprano cuando marcaron. Inclusive en la señal que me pusieron indicaban que yo era el último y que "no pelearan". 
Fuerte el día. Tan intenso como una guardia médica. Me llevé varios libros, todos muy provechosos. Me faltó llevar agua, pero estuve bien. El calor era imponente y por los lados pasaban cualquier cantidad de vendedores. Cerca de la estación había todo un ecosistema de avisadores que cuidaban los puestos, indicaban el paso y, de alguna forma, vendían puestos. 
Delante de mí metieron 2 carros. Así que la numeración era cuidada y cumplida, pero con excepciones. 
Ojalá esto pueda mejorar pronto. Esto tiene muchas causas, pero la gente vive las consecuencias de las cosas. El mensaje final es la consecuencia y ahí entran buenos y malos, cumplidores de las leyes y los vivos. 

jueves, 2 de enero de 2020

Infoxicación indetenible

Extraño aquellos días en que sólo existían mensajes de texto y correo.
Ahora hay, aparte de ellos y que casi nadie usa, WhatsApp, Facebook Messenger, Twitter, Instagram, Snapchat, Telegram, por poner los las populares, YouTube tiene mensajería y Google Fotos, Evernote tiene mensajería y otras redes y aplicaciones que aún no uso ni conozco. 
Sólo con WhatsApp se inundan los teléfonos, los grupos, los mensajes de voz, los memes, los stickers y las innumerables cadenas con noticias falsas e inútiles como una prótesis de barriga. 
Y las otras mensajerías hacen lo mismo. Si nos vamos a las redes que las apoyan nos vemos inundados de información al grado de la intoxicación. 
Todo ello consume energía y tiempo. Tanto al teléfono como a nosotros. 
Mi recomendación es leer más libros, usando el teléfono para ello. Podemos usar Google Books, Aldiko o MoonReader. El formato ePub es el que más uso. Hay libros de medicina y e innumerables novelas de uso libre, clásicas y nuevas. 
Deja sólo una red en el teléfono si quieres seguir en contacto con la gente, yo aún sigo con el correo y los textos en la medida que pueda. Ahorran datos y batería. 
Feliz año a todos y esperemos que este año sea más productivo. 

viernes, 27 de diciembre de 2019

Las colas de gasolina no mejoraron con el sistema de placa

Lamentablemente, así es. Me tocó nuevamente hacer mi cola y me quedé mirando para San Felipe cuando fue mi turno. Las matemáticas no fallan. La gente que maneja las estaciones de servicio no tiene el control. Todos se aglomeran adelante y los de las cola sólo una parte accede. Es difícil hacer justicia. 
La estrategia de colocar los días para tanquear por día según el número de placa no aminoró la cola porque lo que las causa no se trató. 
Tuve nuevamente que apoyarme con un familiar que pertenece al cuerpo militar. Costó, pero pude. Y nuevamente también ver cómo era la cosa allí. 
Ojalá el nuevo año traiga una mejor noticia con este problema. Se lo pido a la Virgen de Altagracia y a San Benito. 

domingo, 15 de diciembre de 2019

Haciendo las colas de la gasolina

Estas últimas semanas en Maracaibo han sido toda una tortura para tranquear el vehículo. Siendo el país con la gasolina más barata del mundo ha hecho que se haya convertido en una mercancía para personas que se lucran con ella. Como muchas cosas que el gobierno ha intentado que se universalicen, como la salud, la educación, la Internet, el acceso a la telefonía fija y celular y la gasolina gratis, un grupo de personas ha hecho que estas cosas se conviertan en cosas para venderse. Esas cosas a las que todos debemos tener acceso, unos pocos las capitalizan y las venden: cupos, equipos electrodomésticos, carros ... Y gasolina. 
Estas últimas semanas ha sido sumamente difícil acceder a la gasolina porque unos pocos se han apoderado de ella. Es lo que impresiona. A pesar de que el parque automotor a disminuido mucho sigue habiendo un consumo desmesurado. También hay una parte del iceberg que no se informa: escasa producción, escasa distribución, contrabando, etc. 
Estuve haciendo cola desde la madrugada e, infructuosamente, no he podido. Me quedo en el camino. Pero tuve la oportunidad ayer de ir al comienzo de la fila, a ver qué pasaba. Me quedé impresionado de la cantidad de gente que se involucra en ello. Los militares, los bomberos (esos que están en los surtidores), los políticos, los dueños de las estaciones de servicio, los proveedores de las estaciones de servicio, toda la red de amigos de ellos. Son más de 30 personas metidas en el barullo de gente alrededor de los surtidores que tratan sin lograrlo de hacer justicia a todo el gentío que está en la cola. Las cisternas llegan en la madrugada. Tardan como 40 minutos en hacerlo y descargan algo así como 14 mil litros. Eso equivale a 280 vehículos si se le surten 50 litros a cada uno, pero no es así. Hay vehículos que tiene tanques de hasta 140 litros que, supongo, no deben llenar, hasta las motocicletas, que tienen 10 a 15 litros. Y las motos abunda muchos. 
Lo primero que hice fue presentarme al encargado de la estación, un militar de la Guardia Nacional, que me dijo sin más que no podía, que sólo estaban autorizados los "efectivos", o sea, los militares, policías, guardias, ejército. Nunca había visto tantas motos manejadas por policías y militares. Yo me presenté, por supuesto, como médico que iba a una guardia medica. Y le mostré mis credenciales. No sirvió de nada. 
En la logística de despacho, se inhabilita un surtidor que se deja para los que ellos decidan: el dueño, la encargada, que era una diputada, también había una concejal y el militar jefe. Todos tenían una cuota. 
Para esa cantidad de combustible es lógico que se acabe al mediodía. Un amigo presente, que ha trabajado en ese mundo, me informó que en la estación debe quedar un depósito de 50 mil litros por motivos de seguridad. Es una reserva estratégica. El día anterior, en la misma estación, habían bajado a los 40 mil litros y tuvieron que firmar un acta de lo que había ocurrido. 
Finalmente, ese amigo abogó por mí y me permitieron tranquear luego de las 11 de la mañana, después de haber estado desde las 6. Rogaba a Dios que no se acabara cuando me tocara. 
Se ve cada cosa en esas colas. Pacientes, embarazadas, ancianos y ancianas, plantas eléctricas, personal de salud, personal de guardia. 
La realidad es que no hay gasolina, lo dijeron, la realidad es que no alcanza para todos, la realidad es que la gasolina es regalada, no la cobran. La realidad es que los preferenciales pagan a los que "administran" la cola. 
El daño patrimonial es inmenso: es ecológico, es tributario, es económico, es político, es social. Tiene muchas aristas y lo que se hace es colocar parches.